Las verduras, el aceite de oliva, el pescado, la carne y vino tinto, son los cinco "elementos" fundamentales de la dieta mediterránea.
Ésta ayuda a mantener bajos los índices de colesterol y ayuda a eliminar los radicales libres (células del envejecimiento) gracias a las propiedades antioxidantes del vino.
Usted se preguntará, para qué sacar a la palestra la buena vida culinaria que tienen en el Viejo Continente. Bueno, la respuesta es simple: nuevamente un estudio arrojó que los chilenos se alimentan mal.
Según el índice Aliméntate Sano, estudio realizado por la Universidad Católica y Banmédica, uno de cada 6 adultos-jóvenes presenta riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y obesidad.
Chile es el segundo país en donde se consume más pan en el mundo. Tomando en cuenta esto, hay que saber que una marraqueta produce en el organismo lo mismo que si se tomara al seco un vaso de glucosa, explicó el doctor Federico Leighton, director del Centro de Nutrición Molecular y Enfermedades Crónicas de la Universidad Católica.
El estudio, realizado en 15 mil usuarios, arrojó que:
- Sólo el 11% se alimenta de manera saludable.
- Apenas el 5% consume la dosis recomendada de pescados y mariscos.
- Un 9% consume 5 porciones de verduras y frutas todos los días.
- Y un 60% consume más azúcar que la recomendada
Las consecuencias que trae la mala alimentación es el Síndrome Metabólico. "Este es el efecto más negativo de esta mala alimentación, el cual es la antesala de enfermedades crónicas como las cardiovasculares, cáncer, diabetes y obesidad", explicó el doctor Leighton.
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